12.10.2011

Playa San Juan


Hoy  anduve el camino de vuelta a casa, con:
los ojos descubiertos
el pecho abierto
y las manos desnudas

Hoy he visto al atardecer bajo el peso de mis párpados
y al mar en mi garganta

Hoy he visto un cielo ensangrentado
que se ceñía al castillo,
como queriendo evitar que se lo llevase la noche
como en duelo consigo
para que los pájaros siguieran volando
y para que no nos olvidáramos

Hoy he visto a los árboles dormirse
mecidos por el tenue viento de plata
como bailando al invierno de sexo amarillo
Y he visto su voz, y sonaba,
a la última esperanza

Hoy he visto una mesa de madera blanca
bajo un olivo. Y sobre ella
un taza que podía estar llena
de café, o de suspiros

Y  he recordado esos días
(aquellos en los que ni tu ni yo existíamos)
días en los que la mesa pequeña y astilla
era bosque insurrecto

Curioso, o no
hoy te he visto:  valiente,
hombre, caos, deshielo.
Curioso, o no
hoy te he visto y he dejado de quererte
tanto y tan fuerte como te quiero

Hoy el frío me ha enseñado a los rehenes del día
y me ha desvestido en rojo
para salir de fiesta con la muerte
y he llegado tarde

Hoy he visto un libro vacío
he visto que sus páginas respiraban al ritmo de mis labios
era negro el libro, y de todos los colores
he visto su forma. Y su tacto
que podía ser como el de tus manos
o como el de un cocodrilo

También he visto que te restaba de sus versos

Hoy he visto al asfalto abandonado e inmenso
  llegaba donde llega el horizonte
 lo he visto agrietado por una rama en asomo
que  justo nacida, era más verde que tus ojos

Y he visto un gusano que sonreía
pues, sabía que en mil años
(después de tu y yo haber existido,
si  en algún momento existimos)
el uno será ruina, y la otra, vorágine

Hoy he visto;
a  un desconocido que apartaba la mirada
a  un perro sin dueño
a  un amante sin beso
 más libres que nunca, los he visto

Todas esas cosas, hoy, he visto
de vuelta a casa
y me he visto, en todas ellas
a mí reflejada

13 comentarios:

  1. Increíble... Me encantó... sobre todo el final y especialmente esta parte:

    "Hoy he visto una mesa de madera blanca
    bajo un olivo. Y sobre ella
    un taza que podía estar llena
    de café, o de suspiros..."

    Un abrazo enorme! Gracias por compartir algo tan grande como esas palabras.

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  2. I N C R E Í B L E

    "Hoy he visto un libro vacío,
    he visto que sus páginas respiraban al ritmo de mis labios"

    Aún no te has ido y ya te extraño.

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  3. Es muy muy potente, se lee con intensidad y esta va ascendiendo mientras vas comprendiendo, mientras la vida del poema se va convulsionando con el ritmo que martillea con cada repetición. Genial.

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  4. ADAGIO, cuántas tazas hemos vaciado y llenado hasta llegar a este punto... Un abrazo

    Srta. Miller, esperemos que el libro que tengamos por delante nos deje sin aliento.

    Volianihil, la vida del poema casi nunca se nos acaba. Un saludo

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  5. Com sempre esplèndid


    Bertolt Brecht

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  6. cuantas cosas maravillosas es posible ver en un día. a veces me asombro. Y lo bien que lo cuentas... hacess que uno lo sueñe, de verdad...

    Un placer estar aquí, en tu espacio.
    Bsos.

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  7. Brecht, moltes gràcies. Salutacions :)

    Moderato, por desgracia esas cosas no las vemos siempre. Un placer también. Un saludo.

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  8. alucinante...me quedo sin palabras,lo leería una y otra vez
    maa

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  9. Maa, yo haría una y otra vez ese camino. Abrazos.

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  10. Mi querida Loba, tienes una forma de decir las cosas que me puede. Es un texto magnífico que muestra las maravillas de un día.
    Un beso enorme.
    HD

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  11. Querido Dib, puede que sea de las pocas cosas que nos quedan para expresar como somos de verdad. Un beso.

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  12. 25 veces he leido este poema y continúo suspirando...
    maa

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