Un día más, nos amanece, irremediablemente y con la fugacidad de un parpadeo inconsciente.
No hay canto a la vida. No hay. No consigo enredarme por entre sus notas, ¿dónde estás curvilínea clave de sol?. No consigo notarlas.
Temo al tiempo y su velocidad...
Adéntrate en el delirio.
Las cosas suceden sobre uno mismo, en un túnel estrecho con apenas estrellas a las que brillar. La quietud se torna entonces aplastante, inexorable el presente y su puente hacia el futuro. Sórdida es la incapacidad de aferrarte a los segundos y hacerlos. No saber qué quieres, o si quieres lo que tienes, o qué te tiene. No escuchar las olas del mar, ni las pequeñas piedras que las acompañan en el tango infinito. Se hace imposible parpadear, como las mariposas, ya de alas viejas y rotas. Es la incapacidad de ver más allá del techo en aquellas noches en las que solías viajar. Dime tú, ¿Qué hacer si el Sol no te invita a seguir escribiendo, si incluso las tinieblas te han privado de aquel deseo y no queda más que una paz estática e inquietante?
¿Dónde está lo dulce de las palabras? No hay sitio para ello, se rinde éste al desasosiego.
Doblan las campanas, una tras otra, y nos hacemos pequeños, uno tras otro y unos con otros. Obligados a interiorizar la ironía, a naturalizarla. Perpetuar la organización del mal a base de desidia. Allí donde los que menos tiene duermen en cajeros. ¿Querría entonces más que nunca ser usted poeta? Sí.
Corro, corro, corro, pero no me muevo. La sangre bulle pero no se desborda. El canto llama a tu puerta, afina tu cerebro, como si de una guitarra española se tratase. Es canto pero no pájaro que vuela. Amamantados de una perversión inútil, involutiva, el ocaso de los dioses miserables nos da de respirar. ¡Grita! Y entonaré el coro más hermoso.
Dime amor, ¿Hay ángel alguno? ¿Quedan acaso después de la guerra brazos que abracen, labios que besen? ¿Dónde está el aullido del lobo, la voz de los arboles?
Espera, parece que por aquí asoma...
no se si sientes que el sol te ha abandonado... pienso que tienes luz suficiente para continuar escribiendo
ResponderEliminarcómo me gusta!
admiradora n 1
maa
Como siempre calidad para dar y tomar.
ResponderEliminarSigue así, un beso.